Los niños y niñas también pueden tener problemas con sus emociones o conductas que les dificultan su desarrollo y su felicidad. A veces, estos problemas se deben a situaciones estresantes o traumáticas, como un divorcio, una pérdida, un cambio de escuela o un acoso escolar. Otras veces, se deben a trastornos psicológicos como la ansiedad, la depresión, el déficit de atención o el autismo.
En estos casos, la psicoterapia infantil puede ser una herramienta muy útil para ayudar a los pequeños a superar sus dificultades y potenciar su bienestar emocional y social. La psicoterapia infantil es un tipo de intervención terapéutica que se adapta a las características y necesidades de cada niño o niña, teniendo en cuenta su edad, su nivel de desarrollo y su personalidad.
La psicoterapia infantil se basa en una relación de confianza y respeto entre el terapeuta y el niño o niña, en la que se utiliza el juego como elemento clave para comunicarse y expresarse. El juego permite al terapeuta acceder al mundo interno del niño o niña, conocer sus sentimientos, pensamientos y fantasías, así como facilitarle el aprendizaje de nuevas habilidades y estrategias.
Además, la psicoterapia infantil implica a la familia (y en ocasiones la escuela) en el proceso terapéutico, ofreciendo apoyo y orientación a los padres o cuidadores para mejorar la relación con sus hijos e hijas y favorecer su crecimiento.
Algunos de los beneficios más importantes que aporta la psicoterapia infantil son:
- Es una guía para el desarrollo de su identidad: La psicoterapia infantil ayuda al niño o niña a descubrir sus capacidades y potencialidades sin depender del punto de vista de los demás. Así se fomenta su autoestima sana y su autonomía.
- Es un lugar en el que aprender a expresar emociones: La psicoterapia infantil enseña al niño o niña a identificar sus emociones (alegría, tristeza, enfado…) y a expresarlas adecuadamente según el contexto. De esta forma se mejora su inteligencia emocional y se previenen problemas como la agresividad o la inhibición.
- Les ofrece una estructura para organizarse: La psicoterapia infantil ayuda al niño o niña a estructurar patrones de comportamiento con objetivos puestos tanto en el corto plazo como en el medio y largo plazo. De este modo se favorece su autocontrol, su motivación y su rendimiento académico.
- Les ayuda a convivir y a gestionar conflictos: La psicoterapia infantil mejora las habilidades sociales del niño o niña, como la empatía, la asertividad, la cooperación y la resolución pacífica de problemas. Así se facilita su integración y adaptación al entorno familiar, escolar y social.
- Les ayuda a desarrollar resiliencia y estrategias de afrontamiento: La psicoterapia infantil fortalece la capacidad del niño o niña de superar las adversidades y salir fortalecido de ellas. Para ello, se le proporcionan recursos para manejar el estrés, la frustración, el miedo, el dolor… y recuperar el equilibrio emocional.
Como podemos ver, la psicoterapia infantil es una herramienta muy valiosa para promover el bienestar emocional y social de los niños y niñas, así como prevenir futuros problemas en los adultos. Si crees que tu hijo o hija puede beneficiarse de esta intervención
